El maíz impulsa una facturación récord del campo en León, 820 millones

La producción del campo leonés alcanzó durante el año pasado un valor «nunca antes conseguido» de casi 820 millones de euros, impulsado por la subida de precios del maíz, un cultivo que representa el 33 por ciento de la facturación agrícola y ganadera de toda la provincia. A pesar de ello, los profesionales del sector han tenido que hacer frente a unos elevados gastos, que alcanzaron los 531,5 millones de euros en 2021 según los datos de Asaja León, una cifra marcada por el «importante» incremento de los piensos.

Con todo ello, la organización profesional calcula que la renta empresarial agraria (la resultante de restar a la renta agraria los costes de arrendamientos, intereses y salarios) se sitúa en el entorno de los 25.000 euros anuales de media por cotizante. Se trata de la cantidad «que remunera el trabajo del agricultor», detalló el secretario general de Asaja León, José Antonio Turrado, durante la presentación del balance del sector agroganadero en la provincia de León el año pasado. Una «media» que varía de forma significativa «de unas zonas a otras» y también por sectores.

Lamentan el "desprecio" de Garzón a la carne española: "Si somos uno de los principales exportadores es porque lo hacemos bien" En líneas generales, «no nos importaría que se repitieran» estos resultados exceptuando la situación que viven tanto el vacuno de leche como el vacuno de carne, en una crisis de precios que se ha visto ahondada en los últimos meses. En ese sentido, se mostraron «preocupados» por los costes de este 2022, que ya empiezan altos al contrario de lo que ocurrió el pasado ejercicio. En una rueda de prensa, Asaja León repasó los resultados de todos los sectores tanto agrícolas como ganaderos y respondió a la polémica de las llamadas ‘macrogranjas’, criticando que el ministro de Consumo, Alberto Garzón, hizo «un desprecio a la calidad de nuestra carne en un contexto de mercados internacionales». Turrado recordó que el modelo de integración que se da tanto en el porcino como en la avicultura de engorde cumple con la «exigente» normativa europea y supone una «alternativa» a la incorporación de jóvenes al campo. «Si somos uno de los principales exportadores es porque lo hacemos bien», celebró. Por ello, «lo que queremos es que no molesten, que nos dejen hacer y trabajar», pidió.

Sobre la llegada de estas nuevas generaciones, el secretario general de Asaja León mostró su «preocupación» porque «en algunos momentos se están incorporando más jóvenes de los que el sector en la provincia puede absorber». En este sentido, habló de la falta de tierras y de pastos «para tantos». Según las previsiones de la organización este año se incorporarán más jóvenes que el pasado, unos 200, y es «imposible». «Si la gente no se jubila y las tierras y los prados están todos ocupados, para que entren 200 hay que dar codazos a otros 200 que ya están y no es lo que quiere Asaja», alertó Turrado. «Queremos jóvenes que vengan con un proyecto de futuro que sea viable, que sea rentable y que sean agricultores y ganaderos para toda la vida, no gente que venga al rebufo de unas subvenciones y dentro de tres o cuatro años se vuelva a marchar», apostó. «Al no haber tierras ni haber pastos se está cimentando esto en proyectos muy endebles que muchas veces no tienen viabilidad», explicó. Una de las salidas a esta situación está en las granjas de integración, pero «si alguien que apuesta por ello se encuentra con que todo el mundo le apunta con el dedo como si fuera un delincuente, pues mejor hacer otra cosa».

«En este momento el debate no es cuánta ayuda más hay que dar, es una cuestión de cuánta tierra le damos, y eso no se lo da nadie porque eso no lo tienen los políticos», remató pidiendo que «se le dé una vuelta a eso».

Los elevados costes, que han sufrido especialmente los ganaderos con el precio del pienso, han marcado el año  En el análisis por sectores, Asaja León valora que se ha producido una cosecha «razonable», mientras que la ganadería ha estado marcada por los elevados costes que se han ido incrementando a lo largo del pasado año. La campaña de cereales de invierno ha sido «razonablemente buena» a pesar de ser inferior a la de 2020, con una facturación de 84 millones de euros en la provincia, suponiendo el trigo el 60 % de la producción. Mientras, el maíz sigue siendo el «cultivo estrella», que este año batió todos los récord permitiendo una producción histórica de 277 millones de euros alentada por los altos precios. En otros cultivos como la patata, la alubia y el lúpulo no se han detectado variaciones significativas, mientras que la fruta remonta de una situación «catastrófica» a «cifras de normalidad», lo que supone «un aliciente para el Bierzo». Entre otros, Asaja destaca también la «buena» campaña de forrajes en la provincia, con una facturación que ronda los 56 millones. Se trata de una producción «muy importante», tanto por la cabaña ganadera leonesa como por la venta a comunidades autónomas limítrofes que no disponen de ello. En el apartado agrícola, también destacan la colza y el girasol como cultivos «en expansión», que han registrado además precios «excepcionalmente altos».

En cuanto a la ganadería, Asaja destacó el incremento del censo bovino, con «muchos jóvenes» incorporándose en el vacuno en extensivo. Mientras que el vacuno de leche, con una facturación de 87,7 millones, está sumido en una profunda crisis que «está echando del sector a las explotaciones más pequeñas». En este sentido, valoraron la Ley de la Cadena Alimentaria aunque «no estamos satisfechos de cómo está funcionando».

Además, apuntaron que «la PAC que nos va a llegar no es la que nosotros queremos», en referencia al plan estratégico presentado por España. «Nos va a obligar a producir menos y más caro, por lo tanto vamos a ser menos competitivos», alertó Turrado. «No estamos satisfechos para nada», dijo.