"El cierre repentino e ideológico de las térmicas es inasumible en las cuencas"

Ha estado recientemente en el pueblo de su familia paterna, Matadeón de los Oteros, para pulsar de primera mano la situación del mundo rural, aquejado por el drama de la despoblación y vital para los resultados electorales del día 28 de abril. Ahora concede una entrevista en la que analiza la situación de la provincia y otras cuestiones generales de la actualidad política.

– Los Oteros es una de las comarcas más despobladas de la provincia y allí ha pasado muchos veranos. ¿Qué medidas propone su partido para que zonas como ésta dejen de perder vecinos constantemente?
– Así es. Conozco muy bien el problema porque me ha tocado de cerca y tenemos que trabajar duro para detener la despoblación en el ámbito rural. El Partido Popular lo ha tenido muy claro en sus años de gestión. Por eso propusimos llevar fibra óptica e internet a una velocidad de 300 megas al 100% de los núcleos de población de nuestro país y por eso hemos pedido al Gobierno de Sánchez que no paralice las inversiones del Plan 300x100, como lamentablemente ha hecho. Tenemos que aprovechar la revolución digital en marcha para crear oportunidades en el medio rural. Mientras otros partidos planteaban suprimir las diputaciones o reformar la representación parlamentaria de las provincias con menos población, en el Partido Popular trabajábamos por el campo. Hemos planteado además una Ley de Maternidad para que las mujeres que quieran ser madres tenga todos los apoyos del Estado para poder llevarlo a cabo. Se trata de apostar por apoyos en términos fiscales, de ayudas a la vivienda, conciliación… Y esto es algo que puede beneficiar en gran medida a las mujeres de las zonas rurales.

– Su abuelo era médico de pueblo y los Oteros ha sido también una de las zonas en las que más problemas ha tenido estos años la sanidad por la escasez de profesionales. ¿Qué se puede hacer desde la administración estatal para remediar esta situación?
– La gestión de la sanidad está transferida, así que la competencia es directamente de la Junta de Castilla y León. Me consta que, aunque en esta materia se ha aplicado la llamada discriminación positiva en los municipios más pequeños, se han mantenido reuniones con los responsables autonómicos para que la atención sanitaria siga siendo similar al momento previo a la crisis económica. No obstante, el Gobierno de España, con ayuda de las instituciones europeas, tiene algo que decir. De hecho, en la última Conferencia de Presidentes, las comunidades exigieron una serie de respuestas que el Gobierno de Mariano Rajoy tenía planteadas, de acuerdo con los presupuestos que había de desarrollar. En este sentido, se creó además el Comisionado para el Reto Demográfico con el objetivo de encargarse de forma transversal de todas estas cuestiones referidas a los servicios públicos en las zonas con menos población.

– ¿Apoya su partido el cierre de las centrales térmicas?
– Me he posicionado claramente en contra porque el cierre repentino de estas centrales es ideológico e inasumible económicamente. He reivindicado una transición energética que apure al máximo los plazos de funcionamiento de las térmicas para que no se ponga fin a su actividad antes de tiempo, por su fuerte repercusión en el empleo y en el PIB de comarcas como las leonesas, que viven de esta fuente de energía.

Bajaremos impuestos al sector agroalimentario y apoyaremos la unidad de mercado en todo el país– Otro de los principales sectores de la economía leonesa es el primario, que está inmerso en un proceso de modernización y de cambios en la PAC. ¿Cuáles serían sus criterios a la hora de negociar el nuevo reparto de las ayudas europeas?
– Han sido ya varias las ocasiones en las que he reafirmado el compromiso del PP con el mundo rural a la hora de conseguir que no se pierdan fondos europeos. Cuando llegamos al Gobierno en el año 2011, conseguimos negociar unas expectativas que alcanzaron los 47.000 millones de euros, muchísimo más de lo que nos habían dejado preparado los socialistas. Hemos demostrado en las instituciones europeas que nos importa el campo español. Hay que recordar a Loyola de Palacio, a Miguel Arias Cañete o a Isabel García Tejerina, que sufrían reuniones maratonianas, dándolo todo para lograr más fondos, mientras que el PSOE de Zapatero y de Sánchez se venía a dormir a Madrid en vez de insistir. Cuando recuperemos el Gobierno de España, apostaremos por consolidar el nivel de ayudas que ha conseguido el PP en las perspectivas plurianuales del presupuesto comunitario. De lo que se trata en definitiva es de lograr una PAC que garantice el desarrollo y la competitividad de los diferentes sectores en todo el territorio español y que al mismo tiempo contribuya a la sostenibilidad ambiental. Tanto desde el Gobierno de España como desde las comunidades autónomas y los ayuntamientos, desde el PP siempre hemos apostado por la agricultura y por la ganadería, no solo consiguiendo una PAC que fuese beneficiosa para España, sino poniendo también en marcha la Estrategia de Modernización y Diversificación Rural, el Programa Nacional de Desarrollo Rural y el primer Plan para la Promoción de las Mujeres del Medio Rural.

– Más allá de los fondos europeos, el campo sigue inmerso en un proceso de modernización. ¿Cómo piensa apoyarlo su partido?
– Tengo muy claro que el PP es el partido del campo, hasta tal punto que siempre haremos nuestras las peticiones de los agricultores. Trabajaremos para conseguir que nuestro sector agroalimentario sea más competitivo y pueda exportar más y mejor. Y lo vamos a lograr bajando los impuestos y favoreciendo también una mayor movilidad interior. Para conseguirlo, desde el PP hemos propuesto sobre la mesa la unidad de mercado en todo el territorio español a través de una normativa armonizada. Y ese Plan 300x100 del que hablaba antes para la extensión de la fibra óptica también ayudará a la modernización de la agricultura y a la informatización de los regadíos, entre otras cosas.

– Durante su reciente visita a León y a Matadeón de los Oteros, aprovechó para presentar las candidaturas de su partido para las elecciones generales. ¿Qué destacaría de sus cabezas de lista en la provincia? Ha habido una importante renovación…
– La candidatura al Congreso de los Diputados que encabeza Carmen González Guinda quiere lo mejor para León y también lo mejor para toda España. Se trata de un equipo preparado y fruto de una renovación tranquila. Igual ocurre con la terna al Senado, encabezada por Javier Santiago Vélez. Salimos a ganar las elecciones con el mejor proyecto de futuro para España.

– Se apuesta de nuevo para la Alcaldía de León por Antonio Silván. ¿Cómo valoraría la gestión llevada a cabo durante estos cuatro años?
– Antonio Silván está en el Comité Ejecutivo Nacional del PP, pero valoro sobre todo su gestión, su cercanía con los leoneses y su experiencia, avalada por su buen hacer. Todo ello le permitirá repetir y renovar la confianza de sus vecinos. Es un gran político que conoce bien la administración en sus ámbitos regional, provincial y local. Es garantía de presente y de futuro para León.

– León es una de esas provincias con pocos escaños en las que la división del voto del centro derecha puede acabar beneficiando a la izquierda. ¿Qué les diría a los leoneses para que apuesten por ese voto útil que defiende su partido en esta campaña?
– Creo que nuestra candidatura es el único valor seguro. Estas elecciones son decisivas para el futuro de España y se contraponen dos modelos: el de la crispación y de la desunión que encarnan Sánchez y sus socios Torra y Otegui y la España de la concordia, la unidad y la prosperidad que planteamos desde el Partido Popular. Tenemos que unir el voto para mantener el país unido.

– ¿No cree que habría sido necesario por parte de su partido un mayor esfuerzo a la hora de lograr un acuerdo con Ciudadanos y/o VOX para presentar listas conjuntas?
– Nosotros hemos apostado por la coherencia y por eso planteamos la necesidad de una mayoría en el Senado: por lo que supone para la unidad de España, para garantizar la convivencia y las libertades. De ahí que lanzásemos algunas propuestas, que fueron rechazadas, a otras fuerzas. Y lo hicimos en plazo. No como otros que han hecho su propuesta cuando las candidaturas ya están cerradas y publicadas en el BOE.

– El hecho de que la situación en Cataluña desencadenase el veto a los presupuestos y el adelanto electoral ha acaparado gran parte del protagonismo en las últimas semanas. ¿Cree que Pedro Sánchez volverá a pactar con los independentistas si le cuadran los números tras las elecciones generales?
– No tengo ninguna duda. Iceta lo ha dejado muy claro. Tienen una agenda para la independencia de Cataluña que contiene algunas de las veintiuna exigencias que hizo Torra en el vergonzoso encuentro de Pedralbes. El PSOE pretende vender España a trozos y a plazos. No es lógico que quiera gobernar nuestro país alguien que fía su futuro a los radicales, a quienes llaman a la vía eslovena o tildan a todos los españoles que no se consideran independentistas de tarados. Y su ‘vicepresidente’ Iglesias lo tiene contemplado en el programa.

– ¿Cree que hay peligro de una nueva recesión en la economía? ¿Cómo valora la política económica de Pedro Sánchez? ¿Cuáles serían las claves fundamentales de la suya?
– Ya hay muchos indicadores cayendo y ya se han sucedido las llamadas de atención desde las instituciones europeas. Lo peor de todo es que esto ya nos suena de la época de Zapatero. Nos insultaron por avisar de la crisis, pero luego se demostró que teníamos razón. El PP siempre tiene que salvar la economía. Nuestros resultados nos avalan. Siempre que hemos gobernado hemos creado empleo. Lo cierto es que a los españoles siempre les va mejor con el Partido Popular. Ahora proponemos una revolución fiscal, que va a situar por debajo del 40% el IRPF y del 20% el Impuesto de Sociedades. Vamos a suprimir además Sucesiones, Donaciones, Actos Jurídicos Documentados y Patrimonio. En cuanto lleguemos al Gobierno de España vamos a hacer la mayor devolución de espacios de libertad a los españoles. Queremos poner España en marcha confiando en nuestros autónomos, empresas, trabajadores, emprendedores e innovadores. Porque la administración no está para obstaculizar o intervenir, sino para incentivar y apoyar la actividad de la sociedad.