Denuncian el ingreso de un niño en la misma habitación que otra niña diagnosticada de tos ferina

El padre de un niño de dos meses que ingresó por una fuerte tos el pasado 2 de enero en el Complejo Asistencial Universitario de León ha denunciado que durante los cinco días que permaneció ingresado estuvo en la misma habitación que una niña del mismo tiempo (había nacido tres días antes) que tenía tos ferina, pese a que se trata de una enfermedad contagiosa.

Según especifica el padre del menor, Víctor Mencía, cuando su hijo fue hospitalizado le dijeron que "tenían los mismos síntomas" y que no podían aislar a la niña con tos ferina porque "no había sitio". "Pero al día siguiente ya había habitaciones libres, una al lado", apunta el progenitor, que denuncia así la posibilidad de que su hijo haya podido ser contagiado por esta enfermedad puesto que permaneció cinco días en la misma habitación que la niña que tenía esta dolencia.

Según afirma, "a los padres de la niña también les llamó la atención que su hija no fuera aislada para evitar que contagiara a otras personas", destaca el padre, que vive en Sahagún.

También señala que tras hacerle las pruebas, le dijeron que los resultados estarían «en 24 horas, pero tardaron cinco días, que es el tiempo normal», agrega Mencía, que considera que le "engañaron". Una vez que estaban los análisis, se comprobó que su hijo no tiene tos ferina y fue dado de alta, aunque deberá estar en torno a dos semanas con especial cuidado para saber si finalmente no tiene esta enfermedad.

El padre también resalta que su hijo "ha estado en riesgo cinco días", los que ha estado ingresado junto a la niña con esta enfermedad, por lo que considera que en el caso de que se detecte que sí ha sido contagiada "será provocado por el Hospital".

Eso sí, señala que los profesionales que han atendido al niño lo han hecho con dedicación y culpa a los responsables del Complejo, que fueron los que se "negaron a aislar" a la niña con tos ferina, o lo que es lo mismo, a trasladar a su hijo a otra habitación para evitar que fuera contagiado. También señala que pese a que la pediatra le dijo que tenían los mismos síntomas, «la tos de la niña era mucho más fuerte», por lo que se podía deducir que no era la misma enfermedad.

Mencía resalta que el objetivo de esta denuncia pública es que "no vuelva a suceder" una situación parecida en el Hospital de León, para que así no se ponga en peligro la salud de una persona ante casos de este tipo, en especial al tratarse de recién nacidos.