Capataces de colmillo retorcido

17/01/2019
 Actualizado a 17/09/2019
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Un paisano con azadón es una especie en peligro de extinción, como el dinero y el peatón». La frase la decía con frecuencia, ante hechos extraños, un grande de la conversación, Paco Bolero, que siempre llamaba Maciste a los que iban al gimnasio.

Pues la especie actual más en peligro de extinción es la del jubilado mirando la obra, y no por falta de jubilados ociosos, ni mucho menos, la clamorosa carencia esde obras. Que andan los paisanos de un barrio para otro, caninos de una buena obra que llevarse a sus comentarios, ciertamentecríticos hay que reconocerlo, que los jubiletas son capataces de colmillo retorcido.

Y ahora más, pues como no tienen nada que vigilar cuando la pillan se ceban ¡Qué tiempos aquellos en los que quedaban de un día para otro y se avisaban! «Me han dicho que mañana llegan las escaleras de El Corte Inglés», y había más jubilados en el desembarco que espectadores en la Puentecilla para ver al mítico Tardajos en directo.

Y encima cuando recibimos una de las buenas, canela fina, como los túneles del AVE, resulta que accedera ella es como atravesar un campo de minas:Un vigilante modelo armario de tres puertas que habla poco castellano o, cuando menos, lo practica poco; una valla cubierta con una tela verde que no deja pasar ni los mosquitos... Y todavía los hay que los librany se hacen con un hueco. No veas lo que presumen después en el bar.

Si hay que cobrar entrada se cobra, pero el jubilado tiene sus derechos.
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