Bendita policía

A estas alturas de mi vida, supongo que al igual que ustedes, tengo que decir que si, me siguen sorprendiendo muchas cosas que daba por aprendidas. Les vengo a contar esto por lo siguiente. Caminando por la calle me he encontrado una cartera en cuyo interior se hallaban todos los documentos que una persona pueda transportar, ya sean identificativos o bien bancarios, al resto no le di ninguna importancia, algunos tickets de supermercados y otras cosas sin un valor los suficientemente grande como para hacerme trasladar a una comisaría. Pero dado el carácter del resto de objetos dentro de la cartera, como bien pueden ser documento nacional de identidad, carné de conducir y tarjetas de banco me vi en la obligación de hacer entrega de los mismos a un agente, bueno, a algunos les gusta que les llamen señores agentes, un trato al que me hubiese gustado también recibir dado el porte de tal señor. Bien saben en mi entorno más cercano que la ‘benemérita’ para mi es una gran institución, yo no hago ninguna relación con dictadura alguna y cosas parecidas. Al igual me ocurre, eso si, no tanto cariño como puede ser la Policía Nacional, de la que pensaba que estaban muy preparados, pero no voy hacer un juicio al restos de miembros del cuerpo por una única persona. Desde mi punto de vista un agente se tiene que hacer respetar, desde luego, pero algo me dice que un agente también debe saber diferenciar quien tiene delante y sentirme como un ‘delincuente’ cuando estoy seguro de hacer lo correcto, es algo que no agrada mucho. Pasa exorcizar a mis demonios le dediqué un ‘puto gilipollas’ a la salida del edificio, que ni corto y perezoso hice con voz bien alta. Lo tengo claro, cualquier día este agente me ayudará en otras cosas más importantes en mi vida o en la de cualquier otro ciudadano, cosa que celebro y admiro, pero a día de hoy, me reitero en lo mismo, ‘puto gilipollas’ a ver si aprendes o alguien te enseña a diferenciar un poco, tampoco demasiado la circunstancia y la persona que tienes delante y de paso no dejes que tu compañero tenga que compensar tu falta de aprecio o desprecio. De paso te digo desde aquí que una persona que va hacer entrega de una cartera que encontró en la calle no se va a ver amedrentado por tu cara y tu ‘tonito’ de voz, más bien vas a conseguir que el cuerpo al que perteneces le pueda coger un tanto de ‘tirria’ cosa que conmigo no has conseguido. Bueno ‘señor agente’, como puede observar, si es que algún día me lee, que pase usted un buen día / noche.