Una apuesta de 15,8 millones y 24 ejes para el agro berciano

Pese a que los procuradores en las Cortes regionales del PSOE han solicitado que se detallen las inversiones incluidas para este año en la Plataforma de Dinamización Agroalimentaria, creada en el mes de marzo para la comarca berciana con un presupuesto de aquí al año 2020 de 15,8 millones de euros, la consejera defiende el programa presentado punto por punto. En él aparecen 24 medidas concretas incluidas en tres eslabones de la cadena de valor, por un lado el sector productivo, el transformador y en tercer grado, el comercializador.

El documento defiende la finalidad del Plan «la revalorización de las producciones agrarias más significativas y vinculadas a las figuras de calidad, fomentando la productividad de las empresas agroalimentarias, aprovechando el potencial del sector primario de la comarca», expone. Todo ello aderezado con la oportunidad para fijar población y promover la innovación, además de empujarse en la marca Tierra de Sabor «para mejorar el posicionamiento de los productos agroalimentarios de esta zona en el mercado nacional, en la Unión Europea y en terceros países.

Complementa, según expone la Junta, al Plan de Dinamización Económica de los Municipios Mineros de Castilla y León 2016-2020. Apunta la Consejería que a estas ayudas de la Plataforma se incluyen nueve millones más, procedentes de la Política Agraria Común a las que accederán 630 agricultores hasta 2020.

Dentro del sector productivo, la Plataforma presenta 12 medidas concretas desde las que marca actuaciones. La primera es promover el rejuvenecimiento del sector facilitando el acceso de los jóvenes a las explotaciones y ayudando a que estas se modernicen. Para ello se les dará un trato preferente en los sistemas de ayudas e incluso se les concederá mayores importes, además de apoyar al Banco de Tierras «para facilitar el acceso de los jóvenes a las tierras disponibles».

El segundo punto tiene que ver con reorganizar las propiedades a través de procesos de concentración parcelaria. Incluye obras concretas como al ejecución de la concentración parcelaria de Castropodame, las de zonas vinícolas como Cacabelos. Retomar las concentraciones de Priaranza y las previas a la modernización del regadío del canal bajo, además de concluir la concentración en las zonas de Carracedelo, Villadepalos y Noceda. El fomento de las cooperativas es el tercer apartado productivo, usando programas operativos de las Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas. A ello se une la promoción del asociacionismo por sectores que se necesita sobre todo en sectores como el apícola «de carácter familiar que necesita la integración de los productores para mejorar los aspectos sanitarios de las colmenas y poner en valor la miel». También apunta como «debilidad» de la castañicultura esa carencia.

La Consejería apuesta por el calificativo de ecológica para la agricultura berciana, para lo que se establecerá un apoyo integral para la formación e incorporación de agricultores a estos sistemas. Esa formación se complementa con la específica para mejorar los resultados económicos de las explotaciones, sacando ayudas para la realización de acciones formativas profesionales en este sentido. También apunta establecer acciones dirigidas a las sanidad vegetal, estableciendo un Plan regional de controles oficiales en los que se incluyen actuaciones decontrol de las enfermedades de los productos bercianos. En la lista la Consejería apunta la tinta y el chancro del castaño, además de la avispilla y el agusanado. La podredumbre del pimiento, los ataques de hongos causantes del mildiu en las vides, el control de la mosca en la cereza y en los frutales de pepita el moteado, el fuego bacteriano y el ‘bitter pitt’ del manzano, además del ‘psila’ del peral.

La Consejería apuesta por la creación de una red de explotaciones que se integren en la planificación de las actividades de la Estación de Avisos Agrícolas del Bierzo, con la concreción de planes de prospección y controles. Además, apuesta por la innovación, con el desarrollo de nuevos proyectos relacionados con los cultivos bercianos diferenciándolos «como fuente de competitividad», apunta. También desarrollará un plan demostrativo, en colaboración con los productores y los técnicos, de las distintas figuras de calidad, para ver cómo funcionan distintos productos fitosanitarios. Para ello habrá parcelas experimentales.

En cuanto al sector transformador, la Consejería apuesta por establecer formaciones específicas en optimizar procesos y en sistemas de calidad integrados con el fin de mejorar la calidad. También pretende abrir proyectos de I+D+i «orientados al desarrollo de los productos agroalimentarios que comporten nuevas orientaciones productivas» y adecuación al mercado.Propone proyectos concretos como establecer nuevos protocolos de ahumado para controlar los hidrocarburos en el botillo, desarrollo de recubrimientos comestibles y de herramientas sensoriales que faciliten la acreditación de los comités de cata para los vinos D.O. Bierzo. También establecerá subvenciones para aplicar la gestión electrónica en los negocios del sector agroalimentario.

En el sector comercializador, la Consejería pretende ayudar a mejorar las exportaciones con actuaciones de los Programas y Servicios de Apoyo del Icex. También abre la puerta a la promoción a través de la marca Tierra de Sabor. Otra de las actividades es promocionar el consumo de la Manzana Reineta y la Pera Conferencia en las nuevas generaciones, con el programa de consumo en las escuelas que se puso en marcha en agosto. Por último, su pretensión es aprovechar las sinergias entre turismo, gastronomía y cultura para dar a conocer las formas de producción de los cultivos bercianos. En concreto habla de promocionar la Ruta del Vino del Bierzo, aunque en los últimos meses el Consejo Comarcal ya se ha remangado para iniciar ese tipo de sendas guiadas, de las que ya ha hecho la de la pera y esta semana la de la cereza en Corullón.