En su visita a Camponaraya y apenas unos días después de la subida a máximos históricos del precio de la luz; el carbón y la energía centraron el discurso de Díaz, que subrayó la necesidad de que el ejecutivo tome conciencia de la agónica situación del sector y las cuencas. «Es hora de que el Gobierno dé la cara por el sector minero y que haga frente a la despoblación y la falta de oportunidades», reiteró, recordando que para los ciudadanos, «es difícil de entender que habiendo un subsuelo rico no haya calidad de vida».
Por ello, pidió al Gobierno de Mariano Rajoy que respete lo estipulado en el Plan Nacional del Carbón, cuyos reiterados incumplimientos han dejado al sector al borde del abismo y la desaparición. «Hay un trabajo enorme por delante y se ha perdido demasiado tiempo», recordó Díaz, que lamentó que los populares no se hayan preocupado de lo que ocurrirá en las cuencas a partir del 31 de diciembre de 2018, fecha que la UE ha fijado para el desmantelamiento del carbón.
Para la presidenta andaluza «la derecha no cree en la minería» y recordó las diferencias entre las políticas llevadas a cabo por populares y socialistas en esta materia.
En Andalucía, Díaz ha apostado por un sector que considera que tiene potencial de «crear empleo y bienestar» y mantiene que es necesario defender el «tejido industrial» para que las inversiones terminen repercutiendo en un incremento de la calidad de vida y del bienestar de la sociedad.