Siete meses después, Acacio vuelve a entrenar

El entrenamiento del Abanca Ademar presentaba este martes una noticia inmejorable y largo tiempo esperada. Y es que, siete meses después, el central brasileño Acacio Marqués volvió a entrenar con el grupo como uno más.

Pone así fin al largo calvario que ha tenido que pasar, pues después de estar cinco meses KO la campaña anterior con dos lesiones diferentes, en esta se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha disputando un amistoso en Francia en el mes de agosto.

Obligado a pasar por quirófano y a perderse la mayor parte de la temporada, reforzará al conjunto ademarista en el tramo decisivo de la temporada, pues se espera que en cuestión de un par de semanas pueda estar ya a las órdenes de Rafa Guijosa.

«Este martes fui al médico y me dejó entrenar ya. Voy a probarme una semana o diez días a ver cómo me encuentro y a ver si ya puedo volver a jugar transcurrido este tiempo», apuntaba a La Nueva Crónica, explicando que «voy a entrenar toda esta semana y el próximo lunes volveré a ver al médico para tener una charla con él y contarle a ver qué tal fue, si tengo buenas sensaciones, molestias o alguna cosa; y tendré que hacer algunas pruebas con el fisio para ver si la fuerza en las piernas todavía está igual. Si todo eso va bien no tengo por qué no jugar».

«Voy a probarme una semana o 10 días, luego veré al médico y a ver si transcurrido ese tiempo puedo volver a jugar» Eso sí, de momento en el primer día, todo ha ido de forma inmejorable: «Para mí ha sido todo muy muy bueno. No he tenido nada de miedo y la rodilla ha respondido muy bien, pero tenemos que esperar, que la semana es muy larga y los entrenos muy duros».

Ve por fin el brasileño la luz al final del túnel después de una larga recuperación y de unas últimos días en la que la impaciencia ante el regreso crecía: «Esta última semana ha sido muy dura, porque tú sabes que vuelves el lunes, pero no llega, y quedas con unas ganas locas. Pero ya estoy ahí y bien, a ver cuándo puedo volver a jugar».

Jugar, jugar, jugar. Es la palabra que más repite el brasileño, que sabe que será difícil entrar en la dinámica del grupo desde cero a estas alturas, pero no renuncia a ello: «No sé cómo va a ser. Tengo dos centrales muy buenos que vienen toda la temporada luchando y peleando, pero voy a estar ahí y si me necesita alguna cosa estoy ahí para luchar también».

Quienes no se ejercitaron este martes fueron Sebas Simonet, que sigue recuperándose de su infección en el pie, y Gonzalo Carou, aquejado de una gastroenteritis.