El leonés dirigía ayer su primera sesión como entrenador del conjunto blanquiazul y por la tarde recibía la mejor de las noticias: el comité de Competición dejó sin efecto la expulsión de Chavero ante el Palencia, por lo que el técnico podrá contar con el centrocampista para el trascendental encuentro ante el Celta B.
En su resolución, Competición reconoce que la reacción del catalán se produce tras una provocación y contacto previo del rival, un atenuante según el Código Disciplinario de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), por lo que considera la reacción «instintiva» y «sin que pueda desprenderse un ánimo agresor ni antirreglamentario» contra el jugador palentino.
Con esta decisión, Tomé ve resuelto uno de los primeros contratiempos que se le planteaban. Con Cidoncha todavía recuperándose de la fractura en un dedo del pie y Andy recién salido de una lesión muscular, la sanción de Chavero hubiera dejado al nuevo técnico de la Ponferradina con lo puesto en un centro del campo en el que las bajas abrieron la puerta de la titularidad al canterano Javi García, que ya jugó media hora en El Sardinero y debutó como titular el domingo pasado.
El que no estará este fin de semana será Miguel Núñez. Competición ratificó el partido de sanción para el central, expulsado por doble amarilla en la recta final del encuentro, por lo que se perderá el debut de Tomé ante el Celta B. En cualquier caso, el técnico cuenta con tres centrales a su disposición ya que Gonzalo ya ha cumplido su partido de sanción por acumulación de amonestaciones.
Arranque difícil
Al igual que le ocurrió a Munitis, Tomé iniciará su andadura ante un equipo de ‘playoff’. Sus dos primeros encuentros, ante Celta B y Pontevedra, marcaran el futuro inmediato de una Deportiva que en caso de tropiezo, podría decir adiós de forma casi definitiva a sus opciones de luchar por el ‘playoff’ de ascenso que ya jugó en su primera etapa en el club berciano.