San Andrés celebra su primer bautizo civil del mandato

El Ayuntamiento fue el primero, junto a La Bañeza, que instauró la bienvenida a la comunidad de los recién nacidos en Castilla y León

L.N.C.
18/08/2017
 Actualizado a 19/09/2019
La pequeña que recibió el bautizo civil, junto a sus familiares y a la alcaldesa, María Eugenia Gancedo. | L.N.C.
La pequeña que recibió el bautizo civil, junto a sus familiares y a la alcaldesa, María Eugenia Gancedo. | L.N.C.
El salón del plenos del Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo acogió este viernes un acto de bienvenida a la comunidad de una niña descendiente del municipio cuyos padres quisieron celebrar su nacimiento mediante una ceremonia civil. Se trata del primero que acoge el Consistorio en lo que va de mandato. El tercer municipio de la provincia fue, junto con La Bañeza, pionero en Castilla y León en ofrecer este servicio a aquellas familias que desean conmemorar la llegada de un nuevo miembro a través de un acto laico basado en la Carta de los Derechos del Niño y en la propia Constitución, en lo que al derecho a la educación se refiere. La alcaldesa, María Eugenia Gancedo, fue la encargada de oficiar este acto en el que la menor, llamada Lara, estuvo acompañada de sus padres, sus padrinos, su hermana y otros miembros de su familia.

Durante el mismo, la regidora realizó una pequeña reflexión sobre el significado de la ceremonia, introducida como una manera de "recordar y compartir con las personas que queremos aquello que de verdad importa en nuestras vidas".  "Estamos aquí porque la comunidad de San Andrés tiene un nuevo miembro, que pasa a ser parte de nuestra colectividad, participando plenamente en ella de acuerdo con la legislación vigente, con nuestros derechos y con nuestros deberes", afirmó la regidora, para después destacar que este acto "civil, laico y voluntario" posee un carácter jurídico y otro simbólico. Así, tanto los padres como los padrinos de la niña expresaron su compromiso de educarla "en los valores que cohesionan esta comunidad, que se enorgullece de tener un miembro más".

El acto de bienvenida, de unos diez minutos de duración, concluyó con la lectura de un poema del Premio Nobel de Literatura J.R. Kipling, así como con la entrega de un diploma acreditativo a la pequeña Lara.
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