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Rituales navideños

12/12/2014
 Actualizado a 18/09/2019
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Al margen del empacho indecente de comida y bebida, de compras y regalos, y de luces y sombras comerciales, otro de los rituales que se está asentando en León es la captura del niño Jesús del Belén de San Marcelo. Atrás queda el robo de la imagen de hace unos años que nunca apareció, pero en este 2014 los ‘valientes’ que se atreven a llevarse alguna pieza han vuelto a actuar. En esta ocasión desvararon a San José (aunque ya tiene de nuevo el bastón en su lugar, por lo menos al cierre de esta edición) y rompieron la pierna al niño. Lo dejaron perniquebrado, que diría Alfonso Martínez, el único periodista que conozco que es capaz de informar con un villancico.
Seguro que el niño Jesús de 2011 está como trofeo en algún salón. Como aquella señal de tráfico que apareció en el salón de mi casa después de que animara a un amigo a altas horas de la madrugada a subirla. Cuando me levanté, ahí estaba, él en un sofá dormido y ‘ella’ en el otro. Obviamente, le dije a su ahora esposa que había dormido con ‘una’...
Después de que devolviera la señal a su sitio (la señora que a las dos de la mañana fumaba frente a mi casa aún estará pensando que tenía un vecino con alguna tara), me seguía preguntando que dónde está la gracia. ¿Vamos a seguir jugando como niños pequeños a ser vándalos? ¿Es normal que el Ayuntamiento haya tenido que poner en alguna ocasión seguridad privada a unas esculturas?
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