Por llamarles calcamonías

Todo nos parecía en la ruralidad nuestra una verdadera conjunción astral, señales del más allá:venía a vernos la principesa que está libre de juicios y de maridos; venía sola porque el su ex-paisano había pillado una cuesta abajo con el patinete y se dice que algún cabrón le cortó los cables del servofreno y la última vez que le vieron estaba bajando por Leitariegos a velocidades prohibidas, por lo que le incautó el Seprona a la espera de que alguien le reclame, que no parece el caso... y, sobre todo, venía por los días de San Valentín, que nos pareció como un símbolo.

- Igual viene al olisco;aventuró el pedáneo de Almuzara, que para estos temas de protocolo es el que tenemos más preparado por el cargo vitalicio que ostenta y, sobre todo, por lo bien que se desenvolvió cuando le mandamos bajar a estañarle la cadera a la Duquesa de Alba cuando se la partió en un giro brusco en un salto del tigre del funcionario que trabajaba de Cristo Yacente para la señora.

Ydespués de evacuar consultas en el Ayuntamiento nos dijeron que en estos casos no se suele molestar a la señora, que si viene al olisco ya lo hará saber, que se le nota porque se le clarean las orejas. Y decidimos que lo mejor eran hacer un álbum con la mocedad que tenemos libre de compromisos, seleccionados entre los que ya hubieran gastado la ducha que les corresponde a febrero y compramos un bote de colonia de «a litro»de Nenuco por si eligiera. «Si selecciona se le perfuma y si no pues guardamos el bote para otra ocasión».

Nos salieron siete candidatos, la verdad es quehay material porque la ruralidad trabaja muy bien la soltería, y mandamos a Farraperas con el encargo de hacerle el ofrecimiento. Volvió y dijo:«Nada, no hizo ni amago».

- Pero tú, ¿qué le dijiste?

- Pues lo convenido, doña principesa, aquí le dejo unas calcamonías de solteros lugareños para que, si tiene a bien, vaya uno a conducir los patinetes que habrán quedado en el garaje, no vayan a coger polvo y se artinen.

- Para mí que no sabe lo que es calcamonía, porque si no...