Pedro Rodríguez 'El Marqués' del Cante: "Nací con el virus de la errancia"

Cantaor, artesano, soldador de grandes estructuras, incluso nucleares, trabajador en más de 100 empresas...

Fulgencio Fernández y Laura Pastoriza
08/07/2017
 Actualizado a 14/09/2019
224660104
Pedro no tiene edad —"unos cinco mil años", dice él—; no tiene teléfono —"ni móvil, ni fijo, el que quiera que me escriba, como se hizo toda la vida»—; no tiene raza fija —"mi padre era gitano andaluz y mi madre de León"—; no tiene ataduras —"tengo principios y para tener principios no puedes tener mujer o hijos o hipotecas, porque tienes que pensar en ellos primero"—; no tiene aguante —"he trabajado en más de 100 empresas diferentes porque yo si veo una injusticia o una falta de respeto con un compañero pido la cuenta y me voy"—; no lo podrás encasillar jamás porque Pedro Rodríguez ‘El Marqués’ del Cante sólo es una cosa, inclasificable. Ycantaor, y artesano, y libre.E imprevisible.

Tengo principios y no soporto las injusticias, si veo una pido la cuenta, trabajé de soldador en casi 120 empresas
Vive en San Mamés de la Vega, al lado de La Bañeza, a sus cosas. Hace deporte, gimnasia, yoga, artesanía de la madera, canta, lee y conversa con los amigos. Regresó a este rincón después de recorrer media España y medio mundo:«Pronto me di cuenta que del oficio de mi padre, la arriería, ya no se vivía y busqué el mío, soldador especialista de grandes obras. Trabajé en plataformas marinas, en centrales nucleares, con misiles, en enormes barcos, en empresas como Nervión, Tamoin, Aprinsa, la Babcock & Wilcox... y nunca me faltó trabajo, dejaba una empresa y nada más que me daba la gana ya estaba en otra... así hasta casi 120» y te lo demuestra con la vida laboral que le ha enviado el Ministerio.

Pero, además de ser un hombre de principios lo que le lleva a pedir la cuenta muchas veces, también hay un componente genético en sus idas y venidas laborales. "Reconozco que siempre padecí un virus que heredé de mi padre, el de la errancia, él era un gitano nómada y a mi lo de echar raíces siempre me sonó a atarme los pies a una tierra y a mí jamás me ha atado nada, siempre he querido ser como los pájaros, un ser libre". Y libre trabajó en El Bierzo, en Barcelona, en Vizcaya, en Galicia, Cantabria o los mares del Norte. Y libre se fue cuando le dio la gana.

Hasta que algo le ató y le obligó a regresar: su padre y su madre. "Los dos padecieron largas enfermedades que necesitaban cuidados y ahí estuve yo, pegado a sus camas, poniéndoles las inyecciones, lo que hiciera falta, porque yo no mando a mis padres a una residencia con extraños. Estuve yo con ellos y en los ratos muertos cuidándolos fue cuando comencé a trabajar la madera, que no se me da mal".

De mi padre, gitano, heredé el virus de la errancia, echar raíces me parece atarme, quiero ser un pájaro
Y en esa casa de San Mamés de la Vega —que no es su pueblo natal ya que nació en Vanidodes y aunque no tiene edad lo hizo en 1946—, rodeado de mil recuerdos de su azarosa vida, disfruta de la naturaleza y la vida aunque temiendo que pueda darle algún rebrote de ese virus de la errancia que sabe que le inoculó su padre. «Él era un gitano andaluz que llegó a León para trabajar en las carreteras alquilando reatas de burros que él traía de Andalucía. Trabajó en la carretera de las Hoces de Vegacervera y la Cueva de Valporquero muchos años. Ésa era su vida, de aquí para allá, y a las ferias, al trato y al cante, que tenía unaafición tremenda al cante».

Afición que también heredó Pedro Rodríguez Pozos, que un día después de una feria medieval, con los escenarios aún montados, se subió a uno y se puso a cantar. "Estaba allí yo gustándome y pasó una gente, se quedaron escuchando y uno me dijo:¡Qué grande Marqués!; y pensé, éste me acaba de bautizar, El Marqués".

Con ese nombre grabó un disco, acompañado de El Dólar a la guitarra. Pero Pedro essingular en todo y cuando le digo si nos puede dejar un disco (cassete)para escucharlo vuelve otra sorpresa.

- No tengo, sólo tengo uno, el mío, porque hice una edición para los amigos nada más.
- ¿Qué hiciste 100?
- ¿Tu tienes 100 amigos? Hice 5, uno para mí, y los otros para los amigos.
No le des más vueltas, es Pedro Rodríguez Pozos El Marqués. Es así. No le llames, no tiene teléfono.
Archivado en
Lo más leído