Las cuencas se aferran al bipartidismo

Los municipios mineros leoneses consolidan al PSOE y al PP, con una subida del partido de Rajoy, mientras algunos asturianos, como Mieres y Langreo, eligen a Unidos Podemos

N. González / A. Cardenal
28/06/2016
 Actualizado a 14/09/2019
Mineros dirigiéndose a su puestos de trabajo. | CÉSAR SÁNCHEZ (ICAL)
Mineros dirigiéndose a su puestos de trabajo. | CÉSAR SÁNCHEZ (ICAL)
El apoyo del gobierno de la Junta de Castilla y León al Acuerdo en Defensa de la Minería del Carbón que se firmó en Madrid a principios de este mes, aun a pesar de la ausencia de su propio partido: el PP; el compromiso de la consejería de Fomento de revertir la compra por parte de un fondo de inversión de las viviendas en liquidación en Gordón pertenecientes a la Hullera Vasco Leonesa; el anuncio de la Junta de un Plan de Reactivación de cinco millones de euros anuales para las cuencas y un discurso de protección de la minería repetido a machamartillo e incluso contrario al de los dirigentes nacionales del Partido Popular han revertido la tendencia al enterramiento de este partido en las cuencas mineras leonesas.

Si en las anteriores elecciones los municipios mineros de la provincia dinamitaron los resultados del Partido Popular, ahora el partido sube en todos ellos sin excepción. En concreto, el partido liderado por Mariano Rajoy logra 511 votos más en los municipios de Villablino, La Robla, La Pola de Gordón y en los bercianos de Bembibre, Fabero, Toreno, Páramo del Sil y Torre del Bierzo.

Para la formación azul se da la vuelta a una situación de caída libre, aunque este tímido ascenso no es una gran victoria, porque hay que tener en cuenta que se produce en comparación con los anteriores comicios, en los que el partido perdió más de 4.000 votos en los municipios mineros de la provincia. De esta forma la subida se hace en referencia a esos miles de votos que, en esta nueva oportunidad, tampoco han regresado.

El PSOE protagoniza ahora, en sentido inverso, una leve caída con 317 votos menos en los citados municipios, pero aun así continúa como el partido más votado en todos, a excepción de Bembibre, donde el PP se consolida como el más apoyado, siendo a la vez el que dirige el gobierno municipal con Manuel Otero como regidor. Por el contrario, Páramo del Sil, cuyo alcalde es el popular Ángel Calvo, cambia de tendencia en las nacionales y sigue otorgando la mayoría de sus votos a los socialistas.

En todo caso, igual que ha ocurrido a nivel nacional, los municipios mineros siguen cimentando el bipartidismo y son el PSOE y el PP los partidos que aglutinan mayor número de electores. Aun así, los buenos resultados de Podemos, ahora como Unidos Podemos, se consolidan en algunos municipios en los que incluso experimentan pequeñas subidas, como en Fabero, Páramo, La Pola de Gordón, La Robla, Villablino y Toreno. En otros, como Bembibre y Torre del Bierzo, pierden unas decenas de votos.

Aunque los partidos históricos se mantienen sin demasiados sobresaltos, e incluso con la subida de medio millar de votos de los populares, se fija también la segunda posición alcanzada por la formación de Pablo Iglesias en los anteriores comicios en municipios como Fabero, Toreno y Villablino. En esta nueva cita con las urnas sólo se produce uncurioso ‘sorpasso’ (aquí sí) sobre el Partido Popular en Páramo del Sil, que queda en tercer lugar, a pesar de la victoria obtenida en este mismo municipio en las elecciones municipales.

Sin embargo, la nueva formación de izquierdas no logra sobrepasar al partido de Pedro Sánchez, que mantiene el bastión rojo socialista en los municipios mineros de la provincia.


Mieres y Langreo sí son morados


La comparativa de las cuencas mineras leonesas con las vecinas de Asturias y Palencia muestra una dinámica similar, excepto el ‘sorpasso’ ajustado en algunas. Si bien es cierto que en Langreo, donde Podemos en solitario se quedó a doscientos votos de ganar a los socialistas y la coalición con Izquierda Unida consiguió ser la opción más votada, sus 7.385 votos quedan muy lejos de los más de 8.000 que cosecharon el 20-D por separado.

Lo mismo ocurrió en Mieres. Los morados ganaron en los anteriores comicios y se consolidaron el domingo como primera fuerza, pero perdieron votos respecto a los conseguidos por Podemos y Unidad Popular por separado.
La pérdida de fuelle de Unidos Podemos la aprovecharon socialistas y populares, que subieron ligeramente e incluso ganaron en municipios como Aller, mientras que el PSOE mantuvo feudos como el de San Martín o Pola de Lena.

En Guardo, corazón de la cuenca palentina, hubo victoria aplastante del PP, doblando en votos a los socialistas y con Ciudadanos a apenas 70 votos de desbancar a Podemos como tercera fuerza.
Lo más leído