La cláusula de subrogación es el último escollo en la negociación del nuevo convenio laboral para cerca de 600 chóferes de los servicios de autobuses urbanos, interurbanos y de larga distancia de la provincia.
Diversas asambleas celebradas en las últimas semanas han servido para ir esclareciendo los términos de las negociaciones y a falta de una nueva reunión parece que el acuerdo entre las partes está próximo.
Entre las nuevas condiciones pactadas se incluyen subidas salariales, según ha explicado el responsable del sector de la Federación de Servicios para la Movilidad y el Consumo (FeSMC) de UGT, Pedro Aller Fernández.
En el caso de los autobuses de larga distancia existe un preacuerdo y la rúbrica final del convenio depende solo de la redacción de dos cláusulas que tienen que ver con la prevención del alcoholismo y la drogadicción, según ha explicado Aller, para estos problemas sean tratados de forma preventiva y no solo con sanciones.
Las negociaciones vienen teniendo lugar desde el pasado año, cuando desde UGT celebraron una ronda de contactos con los grupos políticos en el Ayuntamiento de León para informar de la apertura del proceso negociador y «para poner en conocimiento las dificultades que padecen tanto los conductores como los pasajeros del transporte urbano de León». No obstante, se espera que los nuevos acuerdos alivien en parte estas situaciones.
La subrogación, última traba en el convenio de 600 chóferes de bus
El nuevo acuerdo se podría firmar en solo unos días si en las próximas asambleas se da luz verde a la cuestión de un eventual cambio de empresas en el servicio
03/05/2017
Actualizado a
11/09/2019
Lo más leído