La sombra de la crisis es alargada

Se dice que la crisis ya ha pasado, que el país empieza a levantarse, pero debe ser su sombra la que sigue tiñendo de negro las estadísticas de la provincia. Por un lado, los bancos, con sus reticencias, empiezan a sacar a la venta todos esos pisos que han adquirido en prenda de aquellos clientes que no pudieron seguir pagando su hipoteca.Los van soltando muy lentamente, sin prisa, esperando que mañana valgan más. Se sigue notando la crisis porque, además, los leoneses no pueden permitirse el lujo de comprarse un coche nuevo y recurren al mercado de segunda mano que, evidentemente, aprovecha ante el aumento de la demanda para ‘ajustar’ los precios, al alza, claro. Y otra noticia que sigue oliendo a crisis, la del empleo en el sector industrial. La provincia leonesa es la única de la comunidad que el pasado año perdió trabajadores en este sector, 69 asalariados concretamente, mientras que en las otras ocho aumentaron. No. León no ha salido de la crisis. 36.000 personas recurrieron durante 2016 a los Centros de Acción Social de la capital leonesa (sólo en la ciudad) que son la puerta de entrada a los Servicios Sociales, otra prueba más de que las necesidades todavía son muchas. Pero en medio de estas circunstancias afloran otras tantas personas que dan ejemplo de resistencia, como el ganadero que ante la crisis láctea sigue defendiendo su profesión y se ha reconvertido a la ganadería de carne.