La Fiscalía archiva la denuncia de la familia de una exresidente en Santa Luisa contra la directora y un médico

«Los hechos denunciados no son constitutivos de delito». Así concluye el fiscal el escrito de cuatro folios en que notifica a los denunciantes que la Fiscalía archiva la denuncia presentada contra la directora de la residencia Santa Luisa y un médico por el trato a una anciana que durante años vivió en dicho centro.

Para la familia de la anciana, de 89 años, «se vulneró la integridad física, psíquica y social» de su madre, según consta en la denuncia. El fiscal Emilio Fernández recuerda a los denunciantes que las diligencias de la investigación «no tienen por objeto investigar irregularidades administrativas sino solamente hechos que puedan tener significación penal».

Emilio Fernández señala en su escrito que, a su juicio, «los tratamientos dispensados para conservar la salud de la interna se dispensaron con arreglo a correctos criterios médicos, sin que de ello se haya derivado una concreta lesión o el agravamiento de sus dolencias».

Sobre la medida adoptada por el centro de «encerrar a la anciana cuando gritaba», el fiscal considera que «no puede considerarse perturbadora ni denigrante para su integridad moral» y que «no hay evidencia de que fuera sometida a sujeción física ni de que se le dispensaran sedantes sino ansiolíticos, tras consulta con el geriatra, con el fin de que conciliara el sueño».

«Sobre la imputación de dejar productos tóxicos al alcance de los residentes, lo único que reflejan las fotos –aportadas por la familia denunciante– es meramente un carro con productos de los habitualmente utilizados en la limpieza de edificios», prosigue el fiscal, que recuerda que hechos similares han sido denunciados ante el Procurador del Común (13 quejas) como ante la inspección de Gerencia de Servicios Sociales y la Diputación, «siendo objeto de al menos seis inspecciones sin que ninguna de ellas se apreciara irregularidad alguna merecedora de corrección».

Así, el fiscal archiva las diligencias abiertas tras la denuncia de la familia de una anciana exresidente en Santa Luisa por estimar que los hechos denunciados no son constitutivos de delito.