Fernando Colomo: "Con los toros tengo una contradicción, la verdad"

El director madrileño, que actualmente rueda en Badalona su nueva comedia con Paco León y Carmen Machi, es coautor junto a Adolfo Alonso Ares del cartel de los festejos taurinos que este sábado dan comienzo

Joaquín Revuelta
24/06/2017
 Actualizado a 19/09/2019
Fernando Colomo con los actores de su nueva comedia, Paco León y Carmen Machi, que actualmente rueda en Badalona.
Fernando Colomo con los actores de su nueva comedia, Paco León y Carmen Machi, que actualmente rueda en Badalona.
El director de cine Fernando Colomo, que estos días rueda en Badalona su nueva comedia titulada ‘La tribu’, protagonizada por Paco León y Carmen Machi, es coautor junto al poeta y pintor Adolfo Alonso Ares del original cartel taurino que anuncia las dos corridas de toros, una de rejones y otra de toreo a pie, que este sábado y el domingo tendrán lugar en el coso leonés. Colomo no pudo asistir, por razones de trabajo, a la presentación oficial del cartel que tuvo lugar el pasado 2 de junio en el sala Pendón de Baeza de la Colegiata de San Isidoro y que contó con la presencia, entre otros, del artista Adolfo Alonso Ares y del empresario taurino Gustavo Postigo. Sin embargo, ha atendido amablemente la llamada de este periódico para explicar la colaboración artística que desde hace casi dos años viene manteniendo con el creador astorgano en forma de ‘bestiario’.

Sobre su relación con el mundo de los toros, el director de ‘La vida alegre’ reconoce tener «una contradicción». «Por un lado aprecio toda esa parte visual, todo el arte que ha generado, con Goya y Picasso a la cabeza, pero por otra parte lo relativo al sufrimiento del animal no lo llevo tan bien», confiesa Colomo, que de niño solía ir a los toros en Navalcarnero, «donde normalmente había novilladas pero llegó a haber corridas con picadores», comenta el director madrileño, que solía acudir a los toros en compañía de su abuelo «y teníamos un balcón especial que solamente se utilizaba para ver los toros en la Plaza Mayor», recuerda el cineasta.

De cómo se ha visto involucrado en la elaboración del singular cartel taurino de las Fiestas de San Juan y San Pedro de León, el actor y director de cine lo atribuye a su amistad con Adolfo Alonso Ares, «pues llevamos trabajando casi dos años haciendo un bestiario a medias. En ocasiones es él quien inicia el cuadro y me lo manda por correo y yo lo remato, y otras veces es al revés. En este caso me propuso hacer el cartel de León y le dije que sí porque él tenía muchísima ilusión y la verdad es que estoy muy contento del resultado».

La utilización de la Coca-Cola cero para lograr las tonalidades ocres que acompañan al diseño y que se asemejan al color de la arena de la plaza de toros es una de las singularidades del trabajo. «Llevamos realizados cerca de treinta cuadros del bestiario que te comenté y aquí también hemos utilizado Coca-Cola, que ha sido una idea de Adolfo. Utilizamos Coca-Cola cero porque no tiene azúcar. Hacemos una reducción, pues la calentamos para que se evapore agua y tenemos tres botecitos, uno ligero, otro medio y un tercero algo más concentrado, con el fin de conseguir diferentes tonalidades. Ya le hemos cogido el punto a la Coca-Cola y la verdad es que a mí me parece un color muy especial, muy interesante, porque tiene esa especie de ocre que, como te digo, se le puede dar más intenso o menos intenso y te permite muchas graduaciones».

Adolfo Alonso Ares comentaba en la presentación oficial del cartel taurino que su interés por la tauromaquia le viene de la lectura de Cervantes y más en concreto de ‘El coloquio de los perros’. Fernando Colomo ha aportado un enfoque más visual, como corresponde a un cineasta. «Lo interesante precisamente es que tengamos dos estilos diferentes. Pienso que eso es lo que le da más valor al cartel y al cuadro, porque son, por un lado, perfectamente diferenciables pero se integran muy bien en el conjunto», reconoce un Fernando Colomo que se encuentra actualmente inmerso en el rodaje de su próxima película, ‘La tribu’, una comedia con Paco León y Carmen Machi como protagonistas. Una fase que reconoce vivir «con una gran alegría, porque es lo que estamos deseando hacer siempre y desgraciadamente tardas mucho en hacer una película. Con suerte logras hacer una película cada tres años y el rodaje es un momento que lo vives con especial ilusión. Y es un poco la esencia de nuestro trabajo. También me gusta mucho la etapa del montaje, sonorización, músicas y todo eso, pero evidentemente el rodaje es donde se halla todo el potencial».

Como no podía ser de otra manera, la nueva película de Fernando Colomo es una comedia, que afronta tras las excelentes críticas recibidas por su anterior trabajo, ‘Isla bonita’, que Colomo abordó con una libertad creativa solo equiparable a la que tuvo con ‘La línea del cielo’. «La verdad es que ‘Isla bonita’ me ha recargado bastante las pilas porque era una película muy experimental, al menos en su planteamiento, porque no teníamos los diálogos escritos, había una capacidad de improvisación muy grande, un equipo técnico muy reducido y una mezcla de no actores y de actores muy jóvenes que tenían muchas ganas pero poca experiencia, afortunadamente, porque buscábamos hacer algo espontáneo y que tuviera mucha libertad».

En este caso es una comedia más conectada con las exigencias de la industria que Colomo ha escrito conjuntamente con Joaquín Oristrell y Yolanda García Serrano y que se desarrolla en parte en una sala de baile. «Esta comedia también tiene sus dosis de libertad, sobre todo en el trabajo que llevan a cabo Paco León y Carmen Machi, a los que les gusta improvisar. Cada cosa que haces es como una especie de escalón que subes y si funciona ya has aprendido algo», reconoce Colomo, que califica ‘La tribu’ como una comedia «más urbana» que ‘Isla bonita’ y que tiene una parte de música o de baile que al director madrileño le atrae especialmente. «La música con el cine es una especie de complemento perfecto», asegura Colomo, que no ve ninguna dificultad a la hora de rodar los bailes que se marcan los protagonistas. «Si lo hacen bien, al contrario. Pienso que es más fácil que rodar otra cosa porque el baile en sí tiene ritmo. Y además como siempre lo hacen igual, puedes cambiar la colocación de las cámaras y siempre tienes la misma escena desde ángulos distintos», señala Colomo, que espera que la cinta pueda llegar a los cines en primavera.
Lo más leído