El transporte berciano "debe mirar a Europa"

Tras 37 años vinculado al mundo del transporte en la comarca, Arsenio García se separó de los volantes y los camiones para ponerse a escribir. Lo hizo porque «creo que soy el que mejor conoce el mundo del transporte en el Bierzo» y porque quería hacerle un guiño a su emprendedor abuelo que se inició en el sector en los años 30. Así, en 2013, y tras dos meses de estudios e investigaciones dio a luz al libro ‘El transporte de mercancías en el Bierzo’ un recorrido hasta nuestros días de un sector floreciente hasta los años 80 y cordón umbilical de toda la saga de los García.
Ahora ha querido darle una vuelta a aquel libro «porque me quedé incómodo. Me faltaban cosas», y gente que ha incorporado en esta segunda edición, como dos empresarios vascos con los que se inició el transporte de pizarra «uno de ellos me pidió que estuviera incluido», dice, o dos gallegos que fueron punta de lanza del sector.

Setenta páginas más y 420 fotografías a mayores incorpora el texto de Arsenio García, fundador de Transportes Bergidum y un entusiasta de la historia y la escritura, que abre puertas a seguir escribiendo, la próxima vez, sobre el rico patrimonio industrial berciano. Pero ahora está saboreando el resultado de la nueva edición de 500 ejemplares que comienza con la historia de su abuelo paterno, Miguel García, emigrante a Estados Unidos, que volvió a casa para comprar una camioneta Ford, que era lo que había conocido más allá del charco, y echarse a andar en un sector con futuro dentro de casa, aunque con un corte de alas durante la guerra civil, cuando se le requisó la flota completa. Siguió después, aunque tocado por aquello, y dejó el legado a sus hijos que vivieron los mejores años de un Bierzo en auge, abrazado por la mina.

En los años 60 se crea la Cooperativa de Transportes del Bierzo, Cotrabi, que presidirá Arsenio García desde los 70 a los 80, cuando abre una agencia de transportes ya con el nombre de Bergidum.

Los mejores años del sector, reconoce que comenzaron en los años 50 con el apogeo minero y la creación de la Empresa Nacional de Electricidad. Aquíestaban grandes empresas «y no había camiones», por eso la comarca se hizo fuerte en el sector «en los años 60 el desarrollo fue abrumador, porque se construían térmicas y la comarca tenía la flota de camiones con basculante más importante a nivel nacional». Era aquí donde se montaban y desde donde partía el cereal para las explotaciones ganaderas de Galicia, además de desde donde se llevaba carbón a todo el país y material para que Endesa creciera en otras zonas.

Pero Galicia vio la oportunidad y comenzó a comprar camiones hasta que desbancó a los bercianos al tiempo que la minería se venía abajo y Victorino Alonso creaba su propia flota.

Tocaba la crisis y en los años 80 y 90 el sector se desdibujó de su crecimiento. García asegura que su idea ante aquella merma era coger el transporte pizarrero de Galicia, ya con camiones trailers, pero no consiguió que su proyecto fuera secundado.

Ahora, asegura que «la clave está en reinventarse», algo que ha ido haciendo el sector pasando de las camionetas a los trailers y también consiguiendo unas infraestructuras adecuadas. García reconoce que las carreteras españolas «están a nivel de cualquier país europeo y considera que la lucha por nuevas autovías como la de Ourense «son una ayuda, pero no hay que exagerar, la conexión es buena», dice, recordando los tiempos en los que había que maniobrar dentro de los puebloso cuando llegaron las circunvalaciones a Ponferrada o a Villafranca como las grandes ayudas para los transportistas.

El futuro del sector, que reconoce que pasa momentos bajos, está en salir fuera «tenemos toda Europa. El Bierzo ha ido a menos, pero se nos han abierto puertas». Asegura que el sector «se ha reinventado muchas veces» en la comarca «yo mismo me considero un superviviente de muchas guerras», dice, y considera que el transporte debe seguir reinventándose, esa es la clave para mantenerse, aunque asegura que muchos se han quedado por el camino «han ido a concurso de acreedores».

Sin embargo, reconoce que el número de profesionales en la actualidad es el más alto de todos los tiempos «hay transportistas en cualquier sitio, antes solo estábamos en Ponferrada y Bembibre, pero ahora están en cualquier pueblecito, pero duran poco tiempo». García tiene esperanzas en que la salida a Europa sea el revulsivo que necesita la comarca para crecer.