El lenguaje del absurdo

Por alguna extraña razón, ‘Milagro en la casa de los Pérez’, estrenada en Barcelona en 1964 con un reparto liderado por Mari Carmen Prendes, Pedro Porcel, Ángel Terrón y José Sazatornil, que llegó a compartir escenario un año más tarde en Madrid con otras dos obras del gran comediógrafo Miguel Mihura, ‘Ninette y un señor de Murcia’, que se convertiría en el mayor éxito del autor, y ‘La tetera’, fue una obra escasamente representada y por ende desconocida para el gran público dentro de la trayectoria del insigne dramaturgo madrileño, por lo que su reposición, que tuvo lugar en el verano de 2015, se nos antoja más que oportuna, pues su humor surrealista conecta mejor con el público actual de lo que lo hizo a mediados de la década de los sesenta, que fue su fecha de estreno. Los Jardines del Galileo, el Teatro Infanta Isabel o el Teatro Reina Victoria han asistido a la «resurrección» de esta divertida comedia sobre un matrimonio acomodado que vive encerrado desde hace siete años en una lujosa mansión con la sola compañía de sus criados y cuya monótona existencia se va a ver alterada por una joven recién llegada a la ciudad, que es portadora de la dirección de la casa y de los datos personales de sus inquilinos y es llevada por un misterioso taxista hasta la lujosa mansión.

‘Milagro en casa de los López’ llega este jueves al Auditorio Ciudad de León de la mano de la actriz Nuria González, que ha estado presente en todas las funciones desde su presentación en 2015, y de Nacho Guerreros, que ha sustituido a Carlos Chamarro en un reparto que se completa con la presencia de Juan Antonio Molina, Elisa Lledó,Ana Mayo y Nacho del Valle. La obra se representa a las 21:00 horas con entradas a 18 euros.

En opinión de Manuel Gancedo, que se ha hecho cargo de la dirección de ‘Milagro en casa de los López’, "poner en escena un Mihura para un director de teatro es el equivalente a lidiar con un Miura para un torero. Don Miguel, que fue hijo de hombre de teatro, tenía la insólita capacidad de combinar recursos para conseguir que una pieza funcionara y por qué no decirlo, con un ojo clínico puesto en la taquilla".

No fue este el caso de la obra que aquí nos ocupa, cuyo segundo acto no convenció ni siquiera al autor.

Sin embargo, la actualidad de la obra ha animado a Manuel Gancedo a recuperar para el público esta pieza que rezuma inteligencia y humor absurdo, del que su protagonista, Nuria González, señalaba al portal 20 minutos que "es un humor en el que no importa la lógica de la trama, sino de la lógica que tiene cada uno de los personajes. En la vida para sentirnos seguros tendemos a parecernos los unos a los otros, cosa que nos perjudica enormemente, pero en el lenguaje del absurdo cada personaje tiene su mundo propio y así se expresa".