El CSI-F lamenta la "desestructuración" y la falta de Brigadas de Investigación de Incendios Forestales

El Centro Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) defiende la "profesionalidad" de la Policía Nacional en su actuación en el caso del incendio del Pajariel, cuyo acusado el joven de 27 años D. R.G, fue declarado no culpable.

Durante el proceso, la abogada defensora cuestionó la investigación policial, a lo que el sindicato ha respondido subrayado que "no pone en duda ni el veredicto ni la profesionalidad de la Policía", porque hacerlo supondría "desviar la atención de nuevo sobre el verdadero problema en la investigación de los delitos ambientales", que según el CSI-F es la "desestructuración y la falta de Brigadas de Investigación de Incendios Forestales pertenecientes a la Escala de Agentes Medioambientales (BIIF)".

Desde CSI-F insisten en que los responsables políticos "no han entendido aún que los agentes medioambientales son los primeros en llegar a los incendios, que son expertos en la materia, que en ocasiones, mientras dirigen la extinción, están rodeados de testigos clave o incluso del propio autor, que tienen la obligación de abrir las diligencias necesarias para comprobar estos delitos y recoger todos los instrumentos, efectos y pruebas (art. 282 LECRIM)" y que, pese a su "cualificación y dotación jurídica", no lo pueden efectuar "correctamente" porque carecen de Brigadas de Investigación que se dediquen a ello en exclusiva, debido a la falta de "voluntad política".

Así, el sindicato reitera su apoyo a la Escala de Agentes Medioambientales, un colectivo que lleva más de 15 años reclamando las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales con las que recoger los indicios y pruebas que permitan culpar o, en su caso, exculpar a un sospechoso. El CSI-F recuerda que se puede luchar contra los posibles intereses económicos de los incendios a base de medidas preventivas para evitar negligencias, pero en el caso de los intencionados, seguir permitiendo la "percepción de impunidad" que existe por falta de voluntad política, "es como tratar de apagarlos con gasolina".