Donar por amor... a la sociedad

Donar sangre es un acto altruista en sí, una forma de contribuir a la sociedad con un bien preciado y de urgente necesidad, en especial en algunas épocas del año como en verano. Pero además este martes podía tener premio, porque el Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León celebró el día de San Valentín con un concurso con el que se quería premiar con un viaje para dos personas entre todos los que quisieran dar su sangre en los puntos fijos establecidos por la Consejería de Sanidad, que en León está en el centro de salud de José Aguado. Así que ayer fueron muchos los que participaron en esta iniciativa en toda la comunidad, y también en León.

Así, de 10 a 14 horas y de 15 a 21 horas el goteo de personas que querían donar sangre fue una constante. Y lo mejor de todo es que la mayoría lo hizo porque quería ayudar con este pequeño gran acto solidario, no porque quisiera participar en el sorteo. De hecho, muchos no lo sabían.

Algunos donan dos veces al año, otros cada dos meses y medio, pero siempre para ayudar
Fue el caso de Francisco Rodríguez, un habitual en las donaciones que ayer por la tarde se acercó hasta José Aguado para hacer algo que cada dos meses y medio repite. "Lo hago desde los 18 años", afirmaba sobre su decisión de donar sangre de forma periódica.
Apuntaba además que se trata de algo que es posible que algún día le haga falta, pero sobre todo con lo que "se puede ayudar, y además de forma gratuita, sin que repercuta en la salud", agregaba este joven. No había terminado y ya estaba Juan Manuel Alonso, otro asiduo de las donaciones, puesto que repite este acto solidario "unas dos veces al año desde hace más de diez".

Juan Manuel lo intenta hacer "los mares o los jueves", coincidiendo con que su hijo juega al baloncesto, y para ello no duda en pedir el permiso para aparcar en la zona reservada para donantes, una de las facilidades que ofrece este servicio ubicado en la segunda planta de José Aguado.

"Me parece que es una responsabilidad con la sociedad", reconocía poco antes de que la enfermera, Pilar Delgado, le preparara para extraerle la sangre.Según explicaba, cada día acuden cerca de una veintena de personas a donar sangre al punto fijo, aunque cuando se desplaza el autobús del Centro de Hemoterapia o de la Hermandad de Donantes de Sangre el número de personas que se somete al pinchazo aumenta de forma relevante.

Y es que la necesidad siempre está ahí, fluctúa según la época pero siempre se requieren extracciones, que van directamente al Centro de Hemoterapia y Hemodonación, situado en Valladolid, desde donde después se redistribuye en toda la comunidad. Normalmente traumatología y cirugía cardiaca son las dos especialidades con más urgencia.