CSIF pide que cambien los sistemas de medicación en la prisión de Mansilla

CSIF recuerda que desde hace dos años “venimos trabajando en una solución a esta cuestión, en colaboración con la Dirección y el área de Administración del centro penitenciario”.Entre las propuestas presentadas, la más viable pasa por la adquisición de un sistema de preparación de monodosis, algo que cambia radicalmente la forma de entregar la medicación.

La propuesta es ofrecer la medicación envasada, de forma separada, en las distintas tomas (desayuno, comida y cena), en bolsitas transparentes identificando el interno, y con indicaciones como la cantidad de pastillas que se han de tomar, la hora o el día, facilitando así el control de la medicación a todos los niveles: farmacéutico, regimental o de seguridad. Este sistema ya existe en otras prisiones de España desde hace años, señala CSIF.

Para el sindicato independiente, “estamos siendo testigos y padeciendo lo peor que una prisión puede llegar a ser, algo que afecta a todos los ciudadanos, lo que debe llevar a tomar medidas, para evitar incidentes como los vividos recientemente, y por eso todas las medidas que se tomen para asegurar la normalidad en el funcionamiento del centro, son bienvenidas”.

“Un día cualquiera en la prisión de León se reparten unos 2.000 comprimidos de medicación psicótropa, además de la metadona. Los martes, en los módulosde respeto, tenemos que multiplicar por 7 esta cifra, dado que se entrega para la semana, permaneciendo custodiada por los funcionarios”, explica CSIF.

Además, actualmente se trabaja con unas 150 moléculas (comprimidos) diferentes. “Datos que, por sí solos, justifican la adopción de otra forma de preparar y repartir la medicación, dada su influencia en la seguridad y el cumplimiento o no cumplimiento de las normas regimentales, por no hablar de la repercusión en el comportamiento, la salud y la vida de los internos”, concluye CSIF.