Bendición de campos en la rogativa de Barrio

Bajo un cielo gris, casi plomizo, los vecinos de La Tercia y Arbas celebraron este domingo, tal y como es tradición el último domingo del mes de mayo,la popular rogativa de Barrio de la Tercia. En un alto, se erige la ermita, frente a los restos del castillo de Arbolio, y para acceder a ella hay dos caminos. Uno, desde la localidad de Barrio, el otro desde Golpejar, y ambos son ‘muy pindios’, como dicen los vecinos.

Antes de la una del mediodía comenzaban a resonar los cohetes, y poco después el tañido de las campañas, tocadas a mano o, mías bien a brazos, como se ha hecho desde siempre. Los vecinos llegaban poco a poco al alto, con increíbles vistas del valle, esperando que este año la lluvia que tanto se pide en la rogativa para el bien de los campos, no llegase para empañar el día de fiesta.

A la una y diez volvían a sonar las campanas, y comenzaba la procesión con la imagen de la Virgen de la Asunción por los alrededores del pequeño templo. Parada para bendecir los campos, esperando que un año más sean fuente de riqueza y abundancia; para volver a la ermita donde se celebró la eucaristía. Tras los actos litúrgicos, no faltó el ya tradicional reparto del bollo preñao acompañado por vino y refrescos.

Con la rogativa ya hecha y a la espera de que éste sea un año lleno de bonanza, la próxima cita en la ermita de Barrio de la Tercia será el próximo 15 de agosto, día de la Asunción, donde volverán a darse cita vecinos de la zona.