¿Aquí no tenía que hacer frío?

Enseña las zapatillas rotas, más bien quemadas por el calor que desprende el asfalto, y casi te lo recrimina cuando te pregunta si se paga entrada en la Catedral y añade:«¿Dónde está el frío del norte?¿Dónde quedó la capital del invierno? ¿Quién dijo eso de que tú no eres de León si no llevas una chaquetina por si acaso? ¿que hago con la chaquetina por si acaso que me va ocupando espacio en la mochila desde hace quince días y no la he logrado poner ni una sola noche?»...

- Sí, se paga entrada en la Catedral;le dices para cortar el chorro de recriminaciones que no acabas de asumir como propias pues no te crees el culpable de la ola de calor, ni del cambio climático, ni de que en muchos bares se les de a los clientes una lista de aquellos mandamientos de ‘tu no eres de León si no...’.

- ¿Y encima cobran por entrar en la Catedral?

- Es que tú no eres de León si no te quejas de que cobren entada en la Catedral.

- Es que yo no soy de León.

- Pues protestas como si lo fueras.

- Es que ya llevo quince días aquí.

- Bien aprovechados, por lo que veo.

- A ver, mientras mi mujer coge folletos en la Oficina de Turismo que no servirán para nada, ¿qué me recomiendas?»