Ahora vas y te (los) defiendes

23/05/2017
 Actualizado a 03/09/2019
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Varias veces, desde este rincón de salida de la lectura del día, he defendido a los grafiteros, a sus obras de arte en la pared, e incluso a algunas simples frases escritas sobre la tapia en blanco, siempre que éstas nos cuenten algo, propicien una reflexión o una sonrisa, que no es poco: «Hazte un favor y piensa», «prohibido fijar cuarteles»... o cosas así.

Seguramente por ello Mauri coloca en este lunes de fútbol y pedristas esta imagen que ha encontrado por esos mundos y le pone un pie de foto que suena a reto: «Ahora vas y los defiendes», que viene a ser algo así como «ahora vas y te defiendes».

Volvemos a la paradoja de que me tendré que defender mientras el mundo está lleno de tipos que se niegan a pedir perdón por nada y mira que hacen más daño que una pared emborronada. Siempre me acuerdo en estas ocasiones de mi amigo Argüello, al que el fórceps dejó hecho un cristo ya de nacimiento, retorcido y feliz, que cada vez que se cruza con una joven veinteañera comiéndose el mundo en cada paso él reflexiona: «A mi el mundo me debe una explicación... pero no se la voy a pedir».

A esa generosidad me acojo. No me pidáis explicación de lo escrito en la pared, pero discursos peores he visto en el Parlamento.
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